Porque esta vida puede ser tan corta como corto nos pareció aquel día en que decidimos saltar de nuestros miedos e ir corriendo detrás de nuestros sueños. “No te detengas ni por mí ni por nadie, ve por lo que te hace feliz”, me dijiste. Y no supe correr en otra dirección que no fuese la tuya. Gracias por regalarme este año envuelto en sonrisas, dolores de barriga por la intensa risa y por los ojos rojos de tanto llorar riendo. El año pasó volando, pasó como pasa una estrella fugaz rozando el cielo infinito: en un cálido y efímero momento de luz. No sé si estarás el próximo año a mi lado, pero mi primer deseo será que todas las personas que siempre han estado en mi vida, sigan estando. Y eso te incluye.
Mi primer deseo será seguir siendo feliz.
(Benjamín Griss)
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