lunes, 8 de febrero de 2016

Un día


Y un día sin esperarlo... Llega alguien a tu vida que repara tu viejo columpio, lo pinta de colores, le asegura las cadenas y te ayuda... Te empuja suavemente y te sostiene. Entonces... Te atreves a levantar los pies del suelo y sientes que puedes volar otra vez...


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