Hay cosas que con solo
mirar el alma te hacen
emocionar.
La naturaleza nos
muestra, sin cesar una
paleta de color y amor,
para que sencillamente
podamos gozar de una
alegría que nos llena
el corazón.
Puede que sean sencillas
flores de color, pero
cuando las juntas ves
que crean un cuadro de
hermosura y armonía
sin igual.
Rojos intensos, blancos
inmaculados, tonos
rosados que enaltecen
el amor, azules que
liberan el alma en una
sutil comunicación,
Ocres y dorados que
invaden de una inexplicable
emoción, que unidas
por un verde esperanza,
nos dicen que en la unión
esta la mayor compresión.
No hay distinción, todo
es una gran sinfonía de
belleza, color y una
delicia para quien lo
aprecia desde el corazón.
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